EUROPA
PRESS
11 septiembre
2018
Identifican
con éxito un tratamiento para luchar contra la obesidad
La Unidad de Enfermedades Infecciosas, Microbiota y Metabolismo del Centro de Investigación
Biomédica de La Rioja (CIBIR) ha desarrollado un nuevo proyecto de
investigación, basado en un modelo animal de experimentación, en el que se
emplea el autotrasplante fecal como tratamiento para
prevenir la obesidad y las alteraciones metabólicas asociadas a la enfermedad.
Los resultados del proyecto han sido presentados por el
director de Investigación del CIBIR, Eduardo Mirpuri,
el gerente de la ADER, Javier Ureña, el investigador
principal del área de Enfermedades Infecciosas, el doctor José Antonio Oteo, y
la investigadora responsable de la Unidad de Enfermedades Infecciosas, Microbiota y Metabolismo, Patricia Pérez Matute.
El proyecto, que ha contado con la colaboración de la
empresa Clean Biotec y la
financiación de la Agencia del Desarrollo Económico de La Rioja (ADER) con un
importe de 129.409,53 euros, ha validado como el autotrasplante
fecal potencia los efectos de la dieta sobre el peso corporal y la grasa de los
modelos animales empleados en el estudio, demostrando que el autotransplante
consolida los efectos de la dieta ante una restricción calórica.
La principal novedad del estudio, pionero en su campo de
investigación, consiste en el empleo de heces del propio individuo en lugar de
las procedentes de un donante, acción que se realiza en la actualidad en el
tratamiento de otras patologías agudas o graves provocadas por diferentes
bacterias.
Durante su investigación, el grupo científico administró las
heces por vía oral mediante el empleo de sonda. Actualmente, la unidad de
investigación y Clean Biotec
estudian la mejor alternativa para la futura administración, valorándose tres
posibilidades: la propia administración oral por sonda, el empleo de cápsulas
liofilizadas o la colonoscopia.
De esta forma, el estudio desarrollado por el CIBIR abre una
puerta al desarrollo de esta terapia para el tratamiento de la obesidad siempre
que la enfermedad no se encuentra asociada a otras patologías de origen
metabólico o genético.
La investigación dirigida por el CIBIR ha concluido que el
tratamiento promueve también una mayor reducción de grasa visceral, elemento
directamente asociado al desarrollo de alteraciones metabólicas y
cardiovasculares.
Hallazgos
vinculados a la flora intestinal
A este descubrimiento se suma la experiencia obtenida en
otros hallazgos del mismo grupo de investigación y que están relacionados con
los cambios que se producen en la flora intestinal. La unidad responsable de la
investigación se encuentra integrada en el área de Enfermedades Infecciosas del
CIBIR, dirigida del mismo modo por el doctor José Antonio Oteo, y compuesta a
su vez por otras dos unidades especializadas de investigación: Artrópodos
Vectores e Inflamación y Envejecimiento.
Esta unidad de investigación se implica directamente en el
estudio de la flora intestinal en diferentes patologías, especialmente en
enfermedades de origen infeccioso, pero también en otras alteraciones cuyo
origen es todavía desconocido como son el síndrome de fatiga crónica, la
esclerosis múltiple o la propia obesidad. La unidad de investigación está
constituida por un equipo multidisciplinar conformado por médicos del
Departamento de Enfermedades Infecciosas del Hospital San Pedro y por
investigadores del ámbito de la Biología Molecular y Celular, la Genética o la Transcriptómica.
La configuración de este grupo persigue la realización de
una investigación de carácter traslacional, es decir,
la aplicación de los conocimientos biomédicos adquiridos en el laboratorio a la
asistencia médica; repercutiendo de este modo en la mejora de la salud y
calidad de vida de los pacientes.
Enfermedades de
gran impacto para la salud pública
Dentro de sus objetivos, la Unidad de Enfermedades
Infecciosas, Microbiota y Metabolismo trata de
identificar la causa que pueda explicar el origen fisiopatológico
de enfermedades de gran impacto para la salud pública así como de encontrar una
posible vía para poder prevenirlas o tratarlas, focalizando en el análisis del
papel de la microbiota y de las terapias basadas en
modificaciones de la flora intestinal en diferentes patologías como el VIH,
hepatitis C, esclerosis múltiple o la obesidad.
Del mismo modo, la unidad dirigida por el doctor Oteo
estudia si los tratamientos actualmente existentes son capaces de restablecer
los cambios observados en la composición de la microbiota
intestinal y, con ello, favorecer la curación del paciente.
Por último, la unidad de investigación analiza los
mecanismos moleculares implicados en el desarrollo de la obesidad y sus
alteraciones metabólicas asociadas, como son el hígado graso no alcohólico, la
resistencia a la insulina o la diabetes.